El pico gasístico y la traición a la patria

Esta bitácora ya es añeja, y esa perspectiva de ya casi veinte añitos en la red me permite volver la vista atrás y recordar comentarios vertidos en ella como que el auge del shale gas en EEUU era el canto del cisne, una burbuja, que no cambiaría el panorama que nos abocaba a la crisis energética ya que pronto pincharía.

Bueno, pues quería compartir con vosotros tres gráficos de esta entrada de WolfStreet. Década y media después de comenzar la fiebre por la explotación de las reservas de gas no convencionales en EEUU.

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Parece que el dichoso cisne tenía repertorio.

Son tres gráficos que explican una guerra…

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… porque a alguien habrá que colocarle toda esa producción.

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Abogo por procesar al grueso de la clase política (y periodística) europea por traición, subordinación a potencia extranjera en perjuicio de los intereses nacionales.

Transcribo algunos artículos del Código Penal español:

Artículo 581 – El español que indujere a una potencia extranjera a declarar la guerra a España o se concertare con ella para el mismo fin, será castigado con la pena de prisión de quince a veinte años.

Artículo 590.1 – El que, con actos ilegales o que no estén debidamente autorizados, provocare o diere motivo a una declaración de guerra contra España por parte de otra potencia […] será castigado con la pena de prisión de ocho a quince años si es autoridad o funcionario, y de cuatro a ocho si no lo es..

Artículo 591 – Con las mismas penas señaladas en el artículo anterior será castigado, en sus respectivos casos, el que, durante una guerra en que no intervenga España, ejecutare cualquier acto que comprometa la neutralidad del Estado o infringiere las disposiciones publicadas por el Gobierno para mantenerla.

Artículo 592.1 – Serán castigados con la pena de prisión de cuatro a ocho años los que, con el fin de perjudicar la autoridad del Estado o comprometer la dignidad o los intereses vitales de España, mantuvieran inteligencia o relación de cualquier género con Gobiernos extranjeros, con sus agentes o con grupos, Organismos o Asociaciones internacionales o extranjeras.

Artículo 595 – El que, sin autorización legalmente concedida, levantare tropas en España para el servicio de una potencia extranjera, cualquiera que sea el objeto que se proponga o la Nación a la que intente hostilizar, será castigado con la pena de prisión de cuatro a ocho años.

Por supuesto, disposiciones análogas existen en el resto de países europeos.

Es una forma civilizada y humanitaria de castigar comportamientos viles que antes se resolvían ante un pelotón de ejecución o penas más infamantes.

Clamo por una Europa independiente, que defienda sus propios intereses estratégicos y no los socave en provecho de potencia extranjera. Tenemos mucha historia detrás para ser la marioneta de nadie; es doloroso observar la indignidad de la situación de subordinación en la que nos encontramos, provocada por una maquinaria político-mediática cuyas piezas clave son teledirigidas desde Washington.

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